Mediante el ensamblaje de objetos y piezas en desuso recolectadas en los más diversos lugares, el autor construye una serie de retratos al más puro estilo Ready-made, es decir, con objetos cotidianos en estado natural que descontextualizados y agrupados se convierten en obra.
Y también en personajes, porque cada “ensamblaje” tiene una personalidad propia y alude a una fisonomía particular. Está el señor de anteojos, el músico, el ególatra, etc. Formados sólo a partir de retazos, de partes de algo, estos personajes hablan de vidas pasadas porque todas las piezas tuvieron una vida útil y por lo tanto una historia, que en algunos casos se remonta al siglo XIX. Un claro ejemplo de cómo el uso del desuso se convierte en un soporte artístico de extraordinario valor.
El autor estudió diseño y por años se dedicó a la publicidad. Por eso conoce tan bien el comportamiento humano, lo que aplica en sus trabajos y le permite profundizar en sus particulares fisonomías.
Proyecto patrocinado por Ley de Donaciones Culturales
3 de septiembre al 2 de octubre
Salas de Exposición. Centro Cultural Las Condes
Entrada liberada, con Pase de Movilidad habilitado