FUERA DE NORMA

PINTURA INGENUA EN CHILE

A mediados de mes finaliza la muestra dedicada a autores prácticamente desconocidos pero que, a juicio del crítico Waldemar Sommer, representan lo mejor de nuestra pintura. Se trata de los pintores ingenuos de Chile; hombres y mujeres que transitaron al margen de lo establecido y fueron capaces de crear imaginarios propios, únicos y genuinos, sólo comparables a lo realizado por sus pares internacionales.

Es que según el crítico, la pintura ingenua se enarbola como un arte aparte, reconocida sólo a partir de la segunda mitad del siglo XIX. Como el francés Henri Rousseau, los pintores ingenuos chilenos retratan su entorno más cercano, lo que no significa que representen literalmente la realidad –como suele ocurrir con los movimientos academicistas- o que la sometan a complejos procesos cerebrales, como en los movimientos posteriores, sino que manejan códigos propios, ajenos a cualquier norma. Por eso, ningún pintor ingenuo se parece a otro y cada uno es un mundo en sí mismo. Con pinceladas que a simple vista parecen torpes y hasta vulgares, los ingenuos acometen su oficio con verdadera pasión irrefrenable. Así, cualquier formato y soporte les sirve. Pintan en telas, cartones, madera, sacos o en lo que tengan a mano, lo que otorga aún más valor a sus obras.

Esta muestra, que se genera a partir de la edición del libro Ingenuidad y Creación (Waldemar Sommer – Ediciones UC), reúne obras pertenecientes a museos y colecciones públicas y privadas del país, lo que da cuenta del valor que los que entienden le otorgan a este singular arte.

Proyecto patrocinado por Ley de Donaciones Culturales

Hasta el 17 de julio
Salas de Exposición. Centro Cultural Las Condes
Entrada liberada, con Pase de Movilidad habilitado